¿Os ha pasado alguna vez que nunca ibais a un sitio porque no os gustaba nada, pero que nada, y de repente entráis de nuevo por casualidad, y veis que todo es ahora distinto y mucho más cercano a vuestros gustos? Pues eso es lo que me ha pasado a mí con Día. Me explico:
Antes, para mí, era uno de esos supermercados low cost bastante cutres, con las cosas desorganizadas a la vista, personal poco amable, mala reposición de productos, e incluso un aspecto poco limpio. Así que nunca entraba en un Día, porque siempre había cerca alguna otra opción más agradable. Hasta que hace pocas semanas entré en uno para comprar una cosa en plan emergencia, y HEY! Ese no era el Día que yo conocía.
Parece como si desde su independencia del gigante de la distribución al que estaba unido, las cosas hubieran cambiado radicalmente. Ahora la tienda era un sitio luminoso, ordenado, limpio, con los estantes rebosantes de producto, muy buenos precios, y además con un personal solícito y educado.
Es como si alguien le hubiera dado la vuelta al Día, y ese es justo el nombre que le han dado a la magnífica plataforma gastronómica que han creado, y que está dando ya mucho que hablar entre bloggers y aficionados a la cocina.
Conocí Demos la vuelta al día porque convocaron un concurso para cocineros amateur, al que alguien me animó a participar, cosa que no hice porque aún me considero novata novatísima en estas cosas. Y… segundo HEY! Los premios eran brutalmente buenos. Nada más y nada menos que 30 Master Classes con gente grande, muy grande: Paco Roncero, Ricardo Sanz, Abraham García, Mario Sandoval, Jesús Almagro, José Luque, José Luis Martín, Joaquín Felipe, y así hasta 30. Un auténtico sueño, y una oportunidad única, que de ninguna otra forma podríais tener si no ganarais un concurso como éste. Tras seleccionar a 24 finalistas, fueron 12 los elegidos, en una final reñidísima y muy espectacular celebrada hace unas semanas en el restaurante Pedro Larumbe, a la que pude asistir y ver cómo se desenvolvían los concursantes. Ambientazo, nervios, y un jurado de primer nivel. Podéis ver imágenes de la final aquí.
Las master classes que reciben los afortunados ganadores se celebran en el espacio gastronómico de la librería A Punto, que por cierto, no está nada mal, y os recomiendo que visitéis, si no la conocíais aún, tanto la parte de librería (tremenda selección de libros gastronómicos) como la parte de aula de cocina. El otro día tuve la suerte de ser invitada por Demos la vuelta al día a la Master Class de Paco Roncero, y puedo decir dos cosas: este hombre es un genio, y los ganadores de Demos la vuelta al día van a aprender lo que no está escrito. Ahora casi me arrepiento de no haber participado en el concurso. Tanta inseguridad, tanta inseguridad… Os contaré esta master class en mi siguiente post, con pelos y señales.
Pero lo que más me gusta de Demos la vuelta al día es que no se ha quedado en el concurso, sino que realmente está creando una comunidad, un espacio para los amantes de la cocina, y están siendo más que generosos, impartiendo numerosos talleres gratuitos de cocina (y no sólo de cocina, yo tuve ocasión de ir a uno de estilismo fotográfico en gastronomía impartido nada menos que por Javier Peñas Capel) y catas de todo tipo. Los cursos son buenos, impartidos por profesionales muy cualificados, y en espacios muy bien dotados. Y repito, son gratuitos!
Y aún más: hay un espacio en su web para subir recetas. Y todas las semanas, alguna de las personas que ha subido recetas gana una noche en un hotel rural de Rusticae, con cena o almuerzo gastronómico incluido. Sip. ¿Esto son brotes verdes, o una empresa que apuesta decididamente por un proyecto ilusionante y lo dota adecuadamente de fondos para llevarlo adelante?
- Estos señores han dado la vuelta completamente a sus tiendas, mejorando enormemente la experiencia de compra.
- Han promovido un concurso gastronómico que probablemente sea el mejor de España para cocineros amateur tras Master Chef.
- Además, imparten cursos gratuitos de calidad y en buenos espacios.
- Y encima, incentivan la participación en su web con noches en hoteles románticos y atracón incluido.
No sé vosotros, pero para mí, esto es verdaderamente darle la vuelta a algo.
No soy embajadora de Día. Día no me paga por escribir este artículo. Pero reconozco que se ha ganado mi simpatía y mi apoyo. Por su patente intención de mejorar, y por su apoyo contundente a la comunidad foodie, a todos aquellos a los que nos mueve la pasión por la cocina. Espero que sigan así por mucho tiempo!!!
Debe estar conectado para enviar un comentario.